El pasado verano estuve trabajando para la productora Voramar Films, que gracias a unos compañeros, me rebotaron esta oportunidad. Fueron unas jornadas durísimas porque debía cargar con mi Sony FS5 y un tele de Canon, y correr con ellos para robar planos detalles. Aún así me encantó la experiencia. Aire libre, montaña, espacios abiertos, esfuerzo, cansancio y la recomensa de llegar al hogar. Dejo aquí los capítulos en los que trabajé como operador de cámara.
Puedes ver los capítulos aquí…